Fanáticos.

eva-duarte1

«Solamente los fanáticos -que son idealistas y son sectarios- no se entregan. Los fríos, los indiferentes, no deben servir al pueblo, porque no pueden servirlo aunque quieran.
Para servir al pueblo hay que estar dispuestos a todo, incluso a morir.
Los fríos no mueren por una causa sino de casualidad. Los fanáticos sí.
Me gustan los fanáticos y todos los fanatismos de la historia. Me gustan los héroes, y los santos, y los mártires, cualquiera sea la causa y la razón del fanatismo.
El fanatismo convierte a la vida en un morir permanente y heroico; pero es el único camino que tiene la vida para vencer a la muerte.
Por eso soy fanática. Daría mi vida por Perón y por el pueblo… porque estoy segura que solamente dándola me ganaré el derecho de vivir en ellos por toda la eternidad
Así, fanáticas quiero que sean las mujeres de mi pueblo y fanáticos los trabajadores y los descamisados.
El fanatismo es la única fuerza que Dios le dejó al corazón para ganar sus batallas.
Es la gran fuerza de los pueblos: la única que no poseen sus enemigos, porque ellos han suprimido del mundo todo lo que suene a corazón.
Por eso los venceremos. Ellos tienen dinero, privilegios, jerarquías, poder y riquezas… pero no podrán ser nunca fanáticos… porque no tienen corazón. Nosotros sí.
Ellos no pueden ser idealistas porque las ideas tienen su raíz en la inteligencia pero los ideales tienen su pedestal en el corazón.»

(Eva Perón)